PASO 1
Toma un molde desmontable de unos 18-20 cm y cúbrelo con papel vegetal. Toma 200 gramos de galletas napolitanas y hazla migas, ya sea a mano (usando una bolsa con cierre hermético y un rodillo) o con una picadora o trituradora.
PASO 2
Calienta al microondas 80 gramos de mantequilla hasta conseguir que se derrita y agrégala a las galletas para crear el fondo. Luego ponlas en el molde y presiona para que quede nivelada.
PASO 3
Toma 1 litros de leche entera y reserva 250 ml, el resto puedes echarlo en un cazo que más adelante pondremos al fuego. Toma 8 hojas de gelatina e hidrátalas en un bol con agua fría.
PASO 4
Disuelve 45 gramos de maizena con un poco de la leche que tenemos reservada. En un bol grande batiremos con la ayuda de una batidora de varillas 8 yemas de huevos , 200 gramos de azúcar y la maizena disuelta.
PASO 5
El resto de la leche de los 250 ml la calentamos en el microondas y una vez caliente agregamos las hojas de gelatina bien escurridas. Remueve hasta que la gelatina se haya disuelto en la leche.
PASO 6
Toma el cazo en el que has puesto los 750 ml de leche y agrega la ralladura de limón y la canela, ponlo a calentar hasta que empiece a hervir.
PASO 7
Cuando haya hervido lo retiramos del fuego y usamos un poco de la leche caliente para unirla a la mezcla de yemas. Volvemos a batir hasta que las yemas adquieran la temperatura de la leche y se hayan mezclado bien. Cuando termines deberás unirlo al resto de la leche y agregar la leche con gelatina.
PASO 8
Mantén esta elaboración a fuego bajo hasta que espese sin dejar que rompa a hervir. Cuando haya acabado, retiramos la ralladura de limón y la canela para verter la mezcla en el molde.
PASO 9
Cubre la tarta con papel film transparente y llévala a refrigeración al menos 12 horas. Cuando la vayas a servir, mezcla azúcar y canela en un bol y espolvorea por encima de la tarta. Con un soplete de repostería quemamos esta mezcla para obtener la capa crujiente característica de la crema catalana.